La llamada del Ministerio del Interior le cayó de forma inesperada a Alejandro Giammattei. Fue a finales de octubre de 2005. Giammattei se imaginaba que podría estar relacionada a la fuga de diecinueve delincuentes de la prisión de alta seguridad “El Infiernito”. El escándalo había obligado el actuar del Ministro del Interior, Carlos Vielman.
No obstante, al Doctor Giammattei, lo sorprendió cuando Vielman sin de inmediato le ofreció el cargo del más alto jefe de presidios de Guatemala. El objetó diciendo que no tenía idea alguna del sistema penitenciario. A lo que el ministro respondió que eso, exactamente, era lo que se necesitaba: alguien que viniera de afuera para sacud ...
Dies ist ein ABO-Artikel
Jetzt für CHF 9.- im ersten Monat abonnieren
Nur für Neukunden, danach CHF 29.-/Monat und jederzeit kündbar.
Oder einfach einloggen…
Wenn Sie als Nicht-Abonnent noch keinen Account besitzen,
registrieren Sie sich jetzt und Sie können 5 Abo-Artikel gratis lesen.
Wenn Sie als Abonnent noch keinen Account besitzen,
registrieren Sie sich jetzt und Sie können sämtliche Artikel lesen.